Tras la vacancia de Martin Alberto Vizcarra Cornejo como presidente de Perú, la población peruana reaccionó a favor y en contra. Y en la región Puno, varios analistas políticos coincidieron con la idea de que Vizcarra, debió ser juzgado, después de su mandato, que debió concluir el próximo 29 de julio.
Por las críticas circunstancias que atraviesa el país, en relación a aspectos económicos, salud, políticos y otros, no era conveniente vacar del cargo a Vizcarra Cornejo.
Eland Vera, aseguro que el congreso de la república actuó a espaldas de la población de forma irresponsable, porque con este resultado el país pierde institucionalidad, es decir el imperio de estado de derecho de las instituciones de la sociedad, como los poderes legislativo, ejecutivo, judicial. En esta crisis se ven debilitados estos tres poderes.
Alberto Quintanilla Chacón, refirió que es irreversible lo sucedido, y según su análisis, la atención al problema de la pandemia no será eficiente, en lo económico se verá negocios a partir del poder que se tiene y; queda a la ciudadanía hacerse presente mediante protestas, y estar vigilantes para que los gobernantes y Manuel Merino no hagan uso y abuso del poder que efímeramente han logrado.
Por su parte Javier Ari atribuyó este resultado, al Tribunal Constitucional, toda vez que aún está en curso una demanda competencial que no está resuelta. Y la vacancia no solo afecta al país internamente, sino que repercute a nivel internacional.
Por otro lado, el abogado Carlos Quispe, opinó que el congreso es un fracaso, y el único cambio que se pude hacer es una asamblea constituyente, un nuevo modelo económico, que es aspiración del pueblo y se debe en caminar para lograrlo.
Finalmente, el también ex congresista Alberto Quintanilla, opinó que Manuel Merino de Lama, es un tipo que no conducirá bien el país, y el principal derrotado por una mala gestión será acción popular, “eso está clarísimo”, sentenció.