El comandante de la Compañía de Bomberos de Puno, John Zea, cuestionó la deficiente labor de las autoridades frente a los incendios forestales registrados en la región, los cuales según indicó no son fenómenos naturales, sino provocados por personas. Explicó que en muchos casos los siniestros se generan por conflictos entre vecinos, limpieza de terrenos para actividades agrícolas e incluso por intereses relacionados a lotizaciones. Zea advirtió que estas acciones afectan el ambiente, la economía de las familias y en ocasiones generan la pérdida de viviendas.

Asimismo, señaló que, si bien la Policía Nacional brinda apoyo en las labores de control del fuego, la función también debería ser la investigación e identificación de los responsables de iniciar los incendios, lo que muchas veces no ocurre. El comandante recordó que se trata de conductas delictivas y que corresponde a las autoridades competentes hacer cumplir las normas.

En relación a la capacidad operativa de los bomberos, Zea informó que la compañía cuenta con alrededor de 60 miembros registrados, pero a cada emergencia suelen acudir entre 12 y 16 voluntarios en diferentes turnos. Reconoció que el personal no dispone de equipos adecuados para enfrentar este tipo de siniestros, lo que representa un riesgo para su seguridad y salud debido a la constante exposición al humo. (R.A.)