China ha reforzado su presencia en América Latina con el establecimiento de una ruta marítima directa que enlaza el puerto de Nansha, en Guangzhou, con el megapuerto de Chancay, en la costa central del Perú. El primer trayecto fue realizado por el buque COSCO Volga, que transportó más de 400 contenedores con mercancía de origen chino. Esta conexión permite acortar el tiempo de navegación entre Asia y Sudamérica a cerca de 30 días y representa una reducción aproximada del 20% en los costos logísticos, según reportó la cadena estatal CCTV.

La reciente ruta marítima entre China y Perú representa un avance estratégico dentro de la Iniciativa de la Franja y la Ruta, promovida por el presidente Xi Jinping, quien describió el proyecto como el inicio de una moderna “Ruta de la Seda marítima del siglo XXI”. El megapuerto de Chancay, desarrollado por la empresa COSCO Shipping con una inversión inicial de US$1.400 millones, se perfila como un nuevo eje logístico clave para vincular Asia con América Latina, evitando el paso por el Canal de Panamá.

China inaugura una nueva ruta marítima directa entre Guangzhou y megapuerto de Chancay

La conexión parte desde el puerto de Nansha, el principal centro logístico del sur de China, y llega directamente a Chancay, ubicado al norte de Lima. El puerto peruano cuenta con 15 atracaderos y tecnología avanzada para recibir buques de gran calado, lo que facilita el intercambio de mercancías sin escalas intermedias. Esta mejora permite una logística más ágil y sostenible entre los dos continentes. Entre los productos que se exportan desde China destacan electrodomésticos, productos electrónicos, muebles, repuestos de automóviles y juguetes, mientras que desde América Latina se espera una mayor presencia de frutas frescas, mariscos, vino tinto de los Andes y minerales en el mercado asiático. El desarrollo de una cadena de frío en Nansha también permitirá conservar estos productos en condiciones óptimas para su transporte.

México y Chile, claves en la expansión de la red marítima china hacia América Latina

Además de Perú, la nueva ruta contempla puertos estratégicos como Manzanillo (México) y San Antonio (Chile). Estas conexiones permitirán que el comercio entre Asia y América Latina se diversifique, además de fortalecer los vínculos económicos regionales con China y reduzca la dependencia de rutas tradicionales como la que cruza el Canal de Panamá. En el caso de Manzanillo, el puerto mexicano se integra como punto clave para redistribuir mercancías hacia América del Norte, mientras que San Antonio refuerza el acceso a los mercados del Cono Sur. Según datos oficiales, el comercio entre China y América Latina superó los 500.000 millones de dólares en 2024, lo que consolida una alianza cada vez más estratégica en términos comerciales y logísticos. (LaRepública)

yc.