Las instituciones educativas privadas tienen un plazo de siete días calendario, contados a partir de ayer domingo 26 de abril, para presentar ante sus respectivas UGEL los planes de recuperación, e informar de ellos a las familias de sus estudiantes.
Así se establece en las orientaciones pedagógicas para el servicio educativo de educación básica durante el año 2020, en el marco de la emergencia sanitaria por el coronavirus Covid-19, aprobadas mediante resolución viceministerial N° 00093-2020 del Ministerio de Educación (Minedu) y publicadas el sábado 25 de abril en una edición extraordinaria del diario oficial El Peruano.
Estas orientaciones, cuyo ámbito abarca las instituciones educativas públicas y privadas de la educación básica, tienen como objetivo brindar a los docentes, directivos y otros actores del sector pautas sobre la reprogramación curricular del servicio educativo durante el 2020, en el marco de la implementación del Currículo Nacional de la Educación Básica, y tomando en cuenta la situación de emergencia sanitaria, que obligó a la suspensión del servicio educativo presencial.
Así, se establece que el periodo lectivo concluirá el 22 de diciembre de 2020, con la posibilidad de extenderse por situaciones debidamente justificadas.
Esta reprogramación articula la modalidad a distancia y la presencial en el marco de la estrategia “Aprendo en casa” o, en su defecto, la estrategia de educación a distancia definida por cada institución educativa o programa educativo privado.
Asimismo, es posible que las escuelas privadas usen los recursos de “Aprendo en casa” como complemento a sus propias estrategias de educación remota.
Las instituciones educativas privadas deben adaptar sus planes de recuperación a lo que se señala en estas orientaciones y a lo establecido en la resolución ministerial Nº 160-2020-MINEDU y la resolución viceministerial Nº 090- 2020-MINEDU.
El plazo para presentar dichos planes a sus respectivas unidades de gestión educativa local (UGEL) e informar a las familias de sus estudiantes terminará el sábado 2 de mayo. Los planes serán objeto de supervisión.
Por otra parte, las orientaciones señalan que la atención educativa en el estado de emergencia sanitaria no puede adoptar la misma forma de los períodos regulares ni pretender reproducir los modos del trabajo educativo presencial.
Como no se espera desarrollar todas las competencias previstas para el año, se recuerda que la noción de ciclo que establece el Currículo Nacional permite seguir desarrollando el año siguiente las competencias que este año no se hayan consolidado.
Horarios, tareas y evaluaciones
Las orientaciones enfatizan que la coyuntura exige asumir roles y prácticas diferentes a todos los actores involucrados en el proceso educativo. En ese sentido, señala que es necesario replantear tareas y horarios.
Al respecto, señala que no es saludable mantener a los estudiantes muchas horas frente a la computadora, viendo televisión o haciendo tareas. El horario de estudio debe organizarse en períodos cortos, de acuerdo con las edades, para no agobiar a las y los estudiantes.
Asimismo, se pide considerar que durante la etapa de aislamiento social no se sature a los estudiantes con tareas y obligaciones, ni se planifiquen actividades en las que se les fuerce a desarrollar las acciones previstas para un año regular.
Se espera que los estudiantes, después del tiempo destinado para el trabajo en algunos de los medios disponibles (web, tv, radio), destinen un tiempo adicional para realizar algunas acciones planteadas en ellos (investigar, leer, dibujar, entre otras).
El tiempo adecuado frente a la pantalla para un niño de inicial a segundo grado de primaria no debe ser mayor a una hora; mientras que para niños de tercer a sexto a grado de primaria no debe superar las dos horas.
En secundaria y en los ciclos inicial, intermedio y avanzado de Educación Básica Alternativa se puede tener hasta dos bloques de dos horas cada uno.
Para evaluar los aprendizajes desarrollados en “Aprendo en casa”, las y los estudiantes elaborarán productos que serán revisados por sus docentes, cuando se retome la clase presencial y/o en el transcurso de la fase a distancia, según las condiciones con las que se cuente.
Las II. EE. privadas establecerán sus propios mecanismos de evaluación y retroalimentación, que formarán parte de sus planes de recuperación.
Asimismo, el Minedu aplicará una evaluación diagnóstica que permita determinar los niveles de avance e implementar acciones para asegurar el progreso de los estudiantes respecto de aquellos aprendizajes no consolidados.
Según datos recogidos por una encuesta realizada por el Minedu, 94.5% de los docentes se han comunicado con los estudiantes de las secciones que tienen a su cargo y/o sus familias.
De ellos, la inmensa mayoría (88.7%) lo han hecho por teléfono y el 81% ha acordado un horario para comunicarse con ellos. (Andina)