Dirigentes de gremios de Puno y Juliaca, están dispuestos aceptar la ampliación del estado de emergencia para evitar contagios de la COVID-19, siempre en cuando el gobierno congele la deuda en los bancos y otorgue un subsidio universal para el servicio de agua y luz.
Amador Núñez, presidente del Frente de Organizaciones Populares (FOP) de Puno, cree que es importante frenar los contagios, pero asegura que en el fondo hay una realidad social. “La gente sale a trabajar. Los gastos básicos no esperan. Si el gobierno acepta suspender pagos, y asegura subsidios se podría aguantar. Mientras tanto se seguirá saliendo a trabajar. Esa es la realidad”, aseguró.
Leonel Hualpa, dirigente del cono norte de Juliaca dijo que sí podrían aceptar ampliar la emergencia contra el coronavirus, pero necesitan que se les garantice subsidios. “La semana pasada hemos protestado pidiendo congelamiento de deudas. Los bancos no esperan. Prácticamente si no pagamos nos quedamos en la calle. Hay contagios y cada vez son más, sí. Pero necesitamos medidas a nuestra necesidad. Alguien tiene que responder por todo que nos aqueja”, dijo. (La República)