En la región de Puno, el Centro Integral del Adulto Mayor (CIAM) ha revelado que la mitad de los adultos mayores registrados vive sin el apoyo económico de sus hijos, quienes han incumplido sus obligaciones alimentarias básicas. Actualmente, 500 personas mayores están inscritas en el sistema del CIAM, distribuidas en 11 asociaciones locales. Carlos Espejo Canaza, encargado del centro, informó que muchos hijos no asumen la responsabilidad de cuidar a sus padres, a pesar de los esfuerzos de la institución por contactarlos.

La situación se complica aún más cuando los adultos mayores requieren atención especializada, ya que el asilo municipal de Puno cuenta con estrictos requisitos de ingreso. Según Espejo Canaza, solo pueden acceder aquellos que no tengan ningún familiar vivo, incluyendo hijos o hermanos. Esta restricción limita considerablemente las alternativas de cuidado institucional para los adultos mayores que se encuentran en situación de abandono.

El proceso de verificación para el ingreso al asilo está a cargo de la Policía Nacional, que investiga exhaustivamente los antecedentes familiares de los postulantes. Esta medida busca evitar engaños en las solicitudes de ingreso. Mientras tanto, el número de adultos mayores en situación de abandono continúa en aumento, evidenciando una problemática social que afecta a numerosas familias en la región altiplánica. (R.A.)