La violencia desatada en la Universidad Nacional del Altiplano (UNA) ha dejado una víctima que clama por justicia y solidaridad. Kimberly Chávez Chalco, una prometedora estudiante de Enfermería de 21 años, permanece hospitalizada en el nosocomio regional de Puno con graves lesiones, tras ser aplastada por un estante metálico durante los violentos enfrentamientos ocurridos la noche del martes en el campus universitario.
Estudiante herida en medio del caos
Kimberly, quien cursa el octavo semestre de Enfermería, se encontró en el lugar equivocado en el momento más álgido de una batalla campal entre grupos estudiantiles opuestos y, según testimonios, «matones» afines al rector Paulino Machaca Ari. A pesar de que los médicos han descartado fracturas y lesiones internas graves, la joven aún requiere evaluaciones para descartar posibles daños cerebrales y en la cadera, lo que mantiene en vilo a su familia y amigos.
El director del hospital Jean Paul Valencia ha confirmado que, hasta el momento, ninguna autoridad universitaria se ha acercado para cubrir los gastos médicos de Kimberly, los cuales están siendo asumidos por el Seguro Integral de Salud (SIS) y tratamientos de emergencia. Esta situación ha generado indignación, reflejando el abandono institucional denunciado por la propia estudiante.
Testimonios y vídeos revelan brutalidad.
El incidente se produjo durante un intento de desalojo de los estudiantes que mantenían tomado el campus. Videos difundidos en redes sociales, junto con Múltiples testimonios, muestran la crudeza de los enfrentamientos. Simpatizantes de GANA UNA, un grupo supuestamente afín al rector Paulino Machaca, se habrían enfrentado violentamente con los manifestantes, utilizando objetos contundentes.
Las impactantes imágenes muestran cómo un sujeto empuja deliberadamente un pesado estante de metal que cae sobre Kimberly. Lo más alarmante es que, mientras sus compañeros intentaban desesperadamente rescatarla, otros individuos intentaban volver a derribar el mueble. La refriega dejó un saldo de múltiples heridos con lesiones de diversa índole, incluyendo pedradas, heridas por pirotécnicos «tres tiros» y un corte en la mano.
Indignación y temor ante el abandono institucional
Kimberly, visiblemente afectada por su estado de salud, ha expresado su profunda indignación por el abandono institucional. Si bien la asistencia social de la UNA y el decano de su carrera la visitaron, la joven denunció que este último habría minimizado su estado de salud. Peor aún, en la sesión del Consejo Universitario, Kimberly habría sido culpable por el incidente, alegando que ella no debía participar en la medida de fuerza, una postura que ha exacerbado su sentimiento de desamparo.
Originaria de Anapia, Yunguyo, Kimberly se siente desprotegida ante la «arremetida oficialista» del rector y tema por su integridad. No obstante, ha destacado el inquebrantable apoyo de sus amigos, a quienes describen como «no hipócritas», y que la acompañan en este difícil momento.
Clamor por justicia y resistencia
Desde su lecho de hospital, Kimberly ha lanzado un enérgico llamado a la justicia y ha exhortado a sus compañeros, quienes mantienen tomada la UNA, a «no desmayar» ya «seguir adelante hasta conseguir sus demandas».
Por su parte, el rector de la UNA, Paulino Machaca, ha declarado que no estaba al tanto de los incidentes y que solicitará un informe a la Dirección de Seguridad de la universidad. Esta declaración ha sido recibida con escepticismo, especialmente después de que en la sesión del Consejo Universitario no se permitió la entrada a los asambleístas de REUNE – IDEA, un grupo contrario al rector.
Mientras tanto, los compañeros de Kimberly denuncian la indiferencia de las autoridades universitarias, y la Policía Nacional continúa investigando los hechos para identificar a los responsables de los violentos ataques y llevarlos ante la justicia. La comunidad universitaria y la sociedad puneña esperan respuestas y concretas para garantizar la seguridad de los estudiantes y evitar que la violencia acciones vuelva a teñir de luto las aulas universitarias.