El presidente saliente de Argentina, Mauricio Macri, afirmó este lunes que será la “oposición constructiva y responsable” al Gobierno del peronista Alberto Fernández, quien asumirá como nuevo líder del Ejecutivo el próximo 10 de diciembre.

“Con respecto a mi seguiré ahí, donde me toca ahora, tratando de aportar desde una oposición constructiva, responsable, porque todos creemos que se puede, todos hemos entendido que jamás nos tenemos que volver a resignar”, afirmó durante la inauguración de una estación de ferrocarril en Buenos Aires.

A falta de dos semanas para agotar su mandato, Mauricio Macri repasó los cuatro años de su Gobierno, en los que, a su juicio, dejó “una base que le va a permitir al Gobierno que viene seguir transformando, seguir construyendo”.

De su legado destacó la transparencia y la apertura de nuevos mercados extranjeros para el país, dos de los aspectos que defendió desde que llegó a la Presidencia de Argentina en diciembre de 2015.

 “Hemos vuelto al mundo, abriendo cientos de mercados, simplificando trámites. Lo que esto busca es fortalecer estos valores en los que creemos, que tienen que ver con la verdad, la

Desde que las urnas determinaron la vuelta del peronismo al Gobierno el pasado 27 de octubre, Mauricio Macri apura una transición que culminará el próximo 10 de diciembre, cuando se celebrará el traspaso de mando en favor de Alberto Fernández, una ceremonia que no estuvo exenta de polémica y que finalmente se realizará en la sede del Congreso, a petición del líder peronista.

Tras esa fecha, Alberto Fernández tomará oficialmente las riendas de un país que no atraviesa su mejor momento en lo económico y Mauricio Macri pasará a la oposición, y, como él mismo desveló, gozará de tiempo para realizar otras actividades como cocinar o leer más.

“Voy a disfrutar de la familia, los amigos, el deporte, el cine, ahora sí con más tiempo voy a retomar las lecturas, que las tenía abandonadas”, afirmó el presidente el pasado viernes en un encuentro virtual con sus seguidores en Instagram junto a la primera dama, Juliana Awada.

Awada le recordó que una de sus promesas en los últimos tiempos había sido la de aprender a cocinar, algo que Mauricio Macri reconoció entonces, mientras que respecto a la lectura aseveró que durante estos años todo lo que agarraba eran “informes técnicos”. (El Comercio)