
El presidente de la Federación de Acuicultores y Comercializadores de Trucha de Moho, Gustavo Mamani Mamani, destacó el lanzamiento del proyecto productivo de pejerrey, una iniciativa que se perfila como el segundo gran impulso económico para la provincia altiplánica tras el desarrollo de la cadena de la trucha.
El proyecto, financiado por el Gobierno Regional de Puno con una inversión superior a S/33 millones, beneficiará principalmente a familias de la zona norte.
“Por primera vez hemos recibido el apoyo de la cadena productiva de truchas y ahora con el pejerrey continuamos avanzando”, señaló Mamani en su intervención.

Actualmente, las 24 asociaciones de truchicultores producen entre 24 y 25 toneladas de pescado al año, cifra que asciende a 35 toneladas al incluir a productores independientes. Sin embargo, el dirigente advirtió que la falta de mercados limita el crecimiento del sector, sobre todo tras la crisis política y económica en Bolivia, que redujo la exportación. Aun así, confían en el fortalecimiento de la demanda nacional.
“La provincia de Moho va a tener su planta de procesamiento, y ese es el compromiso que hemos tenido con el Gobierno Regional”, subrayó.
Más allá del impacto económico, uno de los objetivos centrales de la iniciativa es generar empleo para los jóvenes y reducir la migración hacia las ciudades. Según Mamani, la truchicultura ya ha permitido retener al 40 % de la juventud local, y con el pejerrey esperan llegar al 70 %.

“Puno es ganadero, agricultor y ahora acuicultor”, remarcó.
Con este proyecto, Moho refuerza su papel como uno de los principales polos acuícolas de la región altiplánica, abriendo nuevas perspectivas para el desarrollo sostenible de sus comunidades.
