
Conforme estuvo programado en el Coliseo Cubierto de Macusani, se cumplió el último sábado con la Asamblea regional para fortalecer los acuerdos para participar en la Gran Marcha Nacional del 19 de julio, contando con la asistencia de delegados de todas las provincias de la región.
Con relación a las movilizaciones del 19 de julio, se insiste en pedir la renuncia de Dina Boluarte, cierre del congreso y adelanto de las elecciones y en cuanto a la participación se ha acordado que cada provincia movilizará 1,000 manifestantes a Lima y como una medida se ha establecido que en las provincias se acatará un paro total con bloqueo de vías; todo ello debe ratificar cada provincia.

Pero la protesta social en Puno no solo tiene una agenda política; también se oponen a «la explotación» de un yacimiento de litio, que se ubica en la provincia de Carabaya y según los acuerdos de la asamblea, el llamado «oro blanco» no puede salir como materia prima, sino industrializado y las plantas deben instalarse en Puno.
El gobierno peruano dio permiso a la empresa Yellowcake para que determine el nivel de reservas del mineral, dijeron y señalaron que esta compañía de capitales canadienses ha tenido acuerdos con las comunidades puneñas de influencia directa para los trabajos de perforación. Los dirigentes reclaman acuerdos con todos los distritos, de lo contrario, se les desconocerá e impedirá que sigan con los trabajos.
Por otro lado, en relación a otras acciones que se deben cumplir en las diferentes provincias de la región, el teniente gobernador del distrito de Laraqueri informó que se deben cumplir una serie de reuniones para ratificar los acuerdos de la Asamblea de Chucuito – Juli y de la reunión de Macusani adelantando que para el día de ayer domingo cumplirían una reunión para alcanzar los acuerdos, haciendo un llamado para que los tenientes gobernadores asuman esas funciones en los demás distritos.