Tras el fallecimiento del exmandatario Alberto Fujimori, otro tema ha salido a la luz: el futuro de la pensión vitalicia que el Congreso aprobó recientemente para expresidentes, y que en el caso de Fujimori, pese a su condena, le fue otorgada. A raíz de su deceso, esta pensión, equivalente a una suma considerable, será entregada a sus herederos más cercanos, según lo estipulado por la ley vigente.
Juan José Quispe, abogado del Instituto de Defensa Legal (IDL), explicó en una entrevista que el dinero será depositado en las cuentas de los herederos de Fujimori. Si el expresidente dejó un testamento, este determinará la distribución; de lo contrario, la sucesión intestada beneficiará a sus hijos Keiko, Kenji y los demás hermanos Fujimori.
“En caso de que se haya suspendido temporalmente, se puede reactivar y los beneficiarios serán los herederos legítimos. Una de las principales herederas es Keiko Fujimori, quien recibiría este dinero”, señaló Quispe.
El indulto que liberó a Fujimori, sumado a la controversia en torno a su pensión, ha reavivado la discusión sobre el legado del expresidente. Mientras algunos sectores lo recuerdan como el líder que pacificó al país durante los años más duros de la violencia interna, otros no olvidan los graves crímenes cometidos bajo su mandato. (La República)
(E.C)