El forcejeo contra el juez Guido Chevarría Tiznado en Puno, el pasado 6 de junio, ha destapado un escándalo que, según los periodistas Kevin Moncada y Liubomir Fernández a través de La Decana Radio Juliaca, mencionaron que la protesta y el hecho contra el juez se originó por una medida cautelar que paralizó la construcción del Colegio de Alto Rendimiento (COAR) en Juliaca.

Lo más llamativo es que el vehículo donde el juez intentaba subir pertenece al abogado Adelmo Ángel Rodríguez Marroquín. Además, el proceso legal que detuvo la obra fue patrocinado por el Sindicato de Trabajadores de la Dirección Regional de Transportes y Comunicaciones, Vivienda y Construcción de Puno, y fue el propio juez Chevarría quien declaró fundada esta medida.

La investigación de Moncada y Fernández revela un vínculo directamente al juez Chevarría con el abogado Adelmo Rodríguez y su círculo. Coincidentemente, el letrado que impulsó la medida cautelar que perjudicó a los juliaqueños es Walker León Aguilar Castillo, quien, se sospecha, es el cuñado de Adelmo Rodríguez. Donde estas conexiones están levantando serias dudas sobre la imparcialidad del caso y exigen una investigación a fondo.

(E.C)