
A raíz de la detención de Alejandro Toledo en el penal de Barbadillo en Lima, que se suma a la de otros ex presidentes, el analista político Alberto Quintanilla opinó que obedece a la debilidad de la democracia que debe fortalecerse con la presencia de organizaciones política fuertes; señaló que si Toledo hubiera sido respaldado por un partido fuerte posiblemente no hubiera incurrido en delitos con el tema de la interoceánica.
Señaló que en la democracia uno puede rodearse de buenas personas que pueden impedir que se cometa errores, por eso se debe optar siempre por lo colectivo para que con una participación democrática se pueda gobernar sin corrupción, responsabilizando de ello a Fujimori por haber destruido la democracia, porque a partir de su gobierno los partidos se han convertido en licencias o franquicias para participar en elecciones y como lo han señalado muchos, los partidos son organizaciones para delinquir.

Refiriéndose a las nuevas autoridades elegidas, el analista refirió que igualmente se debe cambiar la normatividad para evitar que los nuevos gobernantes se limiten a presentar listados de promesas y no un verdadero plan de gobierno. Dijo que la inoperancia de las nuevas autoridades se refleja en el mínimo porcentaje que se ha invertido en los presupuestos cuando ya se debería llegar al menos al 25 por ciento.
En relación a la crisis política que se ha insinuado como causa para la escasa inversión en 4 meses de gestión, señaló que existen problemas peores en otros países y los pueblos no se perjudican, lo que falta es capacidad de los elegidos y la escasa preparación profesional de los posteriores funcionarios designados.
R.G.Q