El desborde de ríos Coata en la Provincia de Puno y Cacachi en la provincia de Azángaro ha cobrado la vida de dos personas en el altiplano puneño. Las víctimas fueron arrastradas por los caudales cuando intentaban cruzar las carreteras que fueron cubiertas con el agua de los ríos tras las descargas de lluvia y granizo.
La primera desgracia ocurrió este miércoles en la comunidad campesina Primer Choquechambi de la provincia de Azángaro, donde el poblador identificado como Beltrán Cesar Bejar Muchica (44) murió ahogado en las aguas del río Cahuacachi cuando se dirigía a su domicilio ubicado en el sector de Linquipata.
Asimismo, ayer en la mañana falleció Maria Tipo de 70 años de edad tras ser arrastrada por el desborde del río Coata en la provincia de Puno. La mujer al igual que muchas personas se encontraba caminando descalza por la carretera inundada, que une a los distritos de Huata, Coata, Capachica, sin embargo, en un descuido perdió el equilibrio y murió ahogada.
Pese a este hecho, los pobladores continuaron arriesgando sus vidas al cruzar la vía que terminó debajo de las aguas. En este sector, también se utilizaron botes artesanales para rescatar a ciudadanos y animales que se quedaron atrapados en sus viviendas, las cuales corren el riesgo de colapsar si continúan las lluvias en esta parte de la región.
Tanto en Azángaro como en Puno la pérdida de hectáreas de cultivo de pan llevar es incalculable, motivo por el cual los afectados vienen solicitando al Gobierno Regional de Puno la constatación de los daños tras el desborde de los afluentes y la dotación de forraje para el ganado ovino y vacuno.
Asimismo, las autoridades de los distritos afectados vienen evaluando solicitar una declaratoria de emergencia y el reforzamiento de las defensas ribereñas, para evitar más desgracias.
