Cada 7 de abril se celebra el Día Mundial de la Salud como una fecha no solo para defender el derecho a la salud de millones de personas en el mundo, sino también para recordar la necesidad y el deber que tenemos con nuestro cuerpo, especialmente en el entorno laboral, donde pasamos una parte significativa de nuestro tiempo.«Los trabajadores de oficina enfrentan diversos desafíos para mantener su bienestar físico y mental debido a los riesgos inherentes a este ambiente. Sin embargo, con el conocimiento adecuado y la adopción de prácticas saludables, es posible mitigar estos riesgos y fomentar un ambiente laboral más saludable y productivo», sostiene Giancarlo Becerra, director de la carrera de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte de la UPC.

Recordemos que los entornos de oficina presentan una serie de riesgos laborales que pueden afectar la salud de los trabajadores. En ese sentido, el especialista comparte cinco recomendaciones para cuidar de la salud en el trabajo:

1. Mantener una postura ergonómica: Es esencial mantener una postura adecuada al estar sentado durante largos períodos para prevenir lesiones musculoesqueléticas. «Mantener la espalda recta, los pies apoyados en el suelo y los codos y rodillas en ángulos cómodos ayuda a reducir la tensión acumulada en el cuerpo. Además, realizar pausas frecuentes para estirarse y cambiar de posición es fundamental para aliviar la tensión muscular», sostiene el docente.

2. Cuidar la salud visual: El tiempo prolongado frente a pantallas de computadora puede causar fatiga visual debido a la exposición a la luz azul emitida por las pantallas. Para prevenir problemas como sequedad ocular, enrojecimiento y dolor de cabeza, es importante tomar descansos periódicos y ajustar adecuadamente la iluminación en el lugar de trabajo.

3. Promover la actividad física: Combatir el sedentarismo es clave para mantener una buena salud física y mental. Participar en actividades físicas regulares fuera del trabajo, como caminar, nadar o practicar yoga, ayuda a fortalecer los músculos y reduce el riesgo de enfermedades relacionadas con la inactividad física.

4. Gestionar el estrés laboral: El estrés laboral puede tener un impacto significativo en la salud física y mental de los trabajadores. Es importante implementar técnicas de manejo del estrés y tomar pausas activas durante la jornada laboral para prevenir problemas de salud y mejorar el bienestar general.

5. Educación y capacitación en Salud y seguridad laboral: Participar en programas de capacitación sobre salud y seguridad laboral proporciona a los trabajadores las herramientas necesarias para identificar y mitigar los riesgos en el lugar de trabajo. Aprender técnicas de prevención de lesiones y promover un ambiente laboral seguro y saludable es fundamental para el bienestar de todos.

En el Día Mundial de la Salud, recordemos que su importancia en el trabajo es un derecho fundamental de todos los trabajadores. Adoptar hábitos saludables y tomar medidas preventivas puede marcar la diferencia en la salud y el bienestar de cada individuo. Juntos, podemos crear entornos laborales más seguros, saludables y productivos para todos. (Andina)

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