Analizando la realidad nacional en torno a las excusas del gobierno, de que, a causa de las protestas sociales es que se produce la recesión económica y se agudiza la pobreza, el analista Alberto Quintanilla realizó interesantes reflexiones, “si no hubiese habido protestas en el transcurso de la historia, no hubiésemos tenido las 8 horas laborales logradas con sacrificio, con bastante martirologio en la fecha del primero de Mayo en Estados Unidos,  siguiendo por las  movilizaciones en Vitarte en 1919 en Lima Perú, se logró el derecho a huelga, el descanso, todo eso ha sido producto de luchas”

Precisó, “ahora achacarle las luchas, a las protestas que ha habido en diciembre del 22 y en enero, febrero y marzo del 23, en el Perú, es una sinvergüencería que la viene repitiendo ya el premier Adriánzen cuando era embajador de en el Perú ante la OEA y ahora también, cuando ya es premier”, dijo.

Refiriéndose a los estadísticas publicadas por el INEI sobre el tema de la pobreza expresó,  “la pobreza monetaria se mide por el nivel de ingresos que tienen la gente, o sea el sueldo mínimo vital es una cifra que está en 1, 050 nuevos soles y se dice que uno de pobre cuando tiene un ingreso por persona, menor a 485 soles entonces hay que multiplicar el número de integrantes de la familia, es sólo estrictamente con el ingreso;  la otra forma de medir la pobreza es con el satisfacción de necesidades, o sea si las necesidades básicas de alimentación, salud y educación son cubiertas; esta segunda forma es más compleja pero más cercana en la realidad”, advirtió.

También señaló, “la pobreza monetaria es la que se maneja más rápidamente, uno, es ver los ingresos minúsculos reducidos que tienen los trabajadores en general y dos que el Estado no tiene los ingresos suficientes para brindar estos servicios básicos, es el drama de los países subdesarrollados, sus trabajadores son pobres porque ganan poco y el estado también es pobre porque recauda poco”, concluyó.

FBR