
El coordinador regional del partido Renovación Popular, Javier Bernal Salas, salió al frente para justificar la polémica entrega de motos lineales a alcaldes de centros poblados, asegurando que no tienen fines políticos. Sin embargo, la acción ha generado cuestionamientos en un contexto marcado por tensiones sociales y sospechas de proselitismo partidario.
Bernal Salas incluso advirtió que en los próximos días se entregará otro lote de motocicletas a diversas localidades de la región de Puno. Según sus declaraciones, los vehículos no solo servirían para labores de seguridad ciudadana, sino también para mejorar la atención en salud en zonas alejadas.

Alcaldes no devuelven las motos
El dirigente sostuvo que ninguno de los alcaldes beneficiados se ha comunicado con él para devolver las motocicletas.
“Ningún alcalde me ha dicho que voy a devolver, y no creo que lo hagan. Es más, están exigiendo que se cumpla con el compromiso asumido”, expresó Bernal.
Contexto crítico y cuestionamientos
La entrega de estos vehículos ha sido cuestionada por organizaciones sociales y analistas políticos, quienes consideran que podría tratarse de una estrategia de clientelismo político, disfrazada de apoyo logístico. En un escenario de desconfianza hacia los partidos, la medida ha encendido la alerta sobre el uso político de bienes en campaña adelantada.

La falta de transparencia en el origen de los recursos y la insistencia de Bernal en continuar con más entregas, refuerzan las sospechas de que Renovación Popular estaría utilizando estas acciones para fortalecer presencia partidaria en Puno de cara a futuros procesos electorales.