En un tenso y ruidoso encuentro, el defensor del Pueblo, Josué Manuel Gutiérrez Cóndor, fue expulsado del auditorio del Teatro Municipal de Puno por representantes de las comunidades campesinas de la región. Con gritos, arenas y un clamor de justicia, los dirigentes lo acusaron de defender al actual régimen de Dina Boluarte y de ignorar a las víctimas de las protestas de 2022 y 2023.

El incidente se produjo durante el Encuentro Regional de Comunidades Campesinas, donde las autoridades originarias, tenientes gobernadores y ronderos, se manifestaron sintiéndose engañados. Afirmaron que fueron convocados para una capacitación, sin ser informados de la presencia del máximo representante de la Defensoría del Pueblo. Calificaron esta situación como una «artimaña para legitimar al actual gobierno».

«Nuestro rechazo total a la llegada de este señor, más que defensor del Pueblo, es defensor de este sistema y de Dina Boluarte, que ha asesinado a hermanos de Puno. Acá nos han traído con engaños y ahora dicen que nosotros lo hemos invitado, eso es falso», sentenció Leopoldo Quispe, uno de los Apu Mallkus presentes.

Al intentar dirigirse a los asistentes, Gutiérrez Cóndor fue directamente confrontado. Las autoridades originarias le increparon su ausencia y la posición que, según es a favor del régimen actual. «¿Qué ha hecho por las víctimas del 9 de enero? Usted defiende los grandes intereses», le increparon. Pese a los intentos del Defensor por apaciguar los ánimos y escuchar las posiciones, la situación empeoró. La multitud clamaba por su retiro.

«En Puno lo rechazamos, porque la Defensoría no se ha pronunciado por los muertos en Juliaca, en Ilave, en Ayacucho, en Macusani. Tenemos asesinados, heridos, ¿qué ha hecho la Defensoría?, nada, solo se ha coludido con los corruptos», le increpó el Apu Mallku Carlos Gutiérrez Sancho, al calificarlo de “Ofensor del Pueblo”.

 A esto se sumó el dirigente Félix Suasaca, quien cuestionó la inacción de la Defensoría en la defensa de líderes ambientales y personas afectadas por metales pesados. «No hicieron nada por las personas con metales pesados, han permitido que se mate a los defensores ambientales. Usted defiende a los asesinos, a los criminales; nosotros estamos de luto por culpa de ustedes», sostuvo Suasaca.

Tras varios minutos de tensión y el clamor unánime de las autoridades originarias, Gutiérrez Cóndor se retiró del evento. Mientras abandonaba el Teatro Municipal de Puno, entre arengas y gritos que lo tildaban de «asesino», el Defensor del Pueblo intentó justificarse: «Me da mucha pena que no me dejen explicar todo lo que hemos hecho para defender a Puno…», dijo, antes de ser completamente interrumpido.

Luego de salir del evento, Gutiérrez Cóndor se defendió alegando que, de sus cuatro visitas a Puno, esta era la primera vez que era rechazado. Afirmó que la Defensoría del Pueblo fue una de las instituciones que más importancia dio a la investigación de las víctimas de las protestas sociales, brindando apoyo a familiares y gestionando el retorno de carpetas fiscales a sus regiones.

Alegó que en este evento iba a informar sobre el pedido de inconstitucionalidad a la Ley 32293, rechazada por las comunidades, y otras acciones. Finalmente, admitió su cercanía con Perú Libre y el respaldo de esta bancada junto a Fuerza Popular para su elección, pero aseguró que, al asumir el cargo, dejó de lado los aspectos políticos.

(E.C)