Propietarios de grifos y transportistas de combustible de la ciudad de Puno se manifestaron en los exteriores de la sede de Osinegmin en la ciudad de Puno, mostrando su inconformidad por la clausura del grifo San Carlos, ocurrido semanas atrás tras un incidente en el que uno de los muros del establecimiento colapsó sobre una vivienda colindante, lo que causó la muerte de dos obreros. Durante la protesta, Gilme Mayta, vocero del grupo, aseguró que la clausura fue arbitraria y sin fundamento, ya que, según él, los dueños del grifo no tenían responsabilidad en el colapso de la estructura.

Además, Mayta expresó que los griferos y transportistas de gasolina de Puno están en proceso de conformar una asociación, debido a lo que consideran un mal manejo por parte de Osinergnim en sus procedimientos de inspección y sanción. El dirigente señaló que la entidad realiza actos de «atropello» en las clausuras de grifos, además de rechazar la notificación virtual de las sanciones, pues muchos de los empresarios no están al tanto de los correos electrónicos enviados por la entidad. Solicitaron que las notificaciones y dosificaciones se entreguen por escrito, de forma que los propietarios puedan cumplir con los requisitos de manera efectiva.

Por último, Mayta cuestionó la legalidad de las sanciones impuestas por Osinergnim, asegurando que muchas de estas no están basadas en la normativa vigente. Afirmó que los grifos de la región están siendo objeto de «apropiaciones» debido a la demora en los trámites y multas injustificadas, las cuales pueden ascender a montos no menores a 5 mil soles. Los manifestantes exigen que se respete la normativa y se brinde un trato justo a los grifos de la ciudad. (R.A.)