Porfirio Enríquez Salas, ex rector de la Universidad Nacional del Altiplano (UNA), consideró que Puno actualmente es una de las regiones más pobres del Perú porque aún no logra recuperarse de la pandemia sanitaria. “Muchas personas tuvieron que dejar sus empleos (en la ciudad) y refugiarse en las comunidades campesinas”, expresó y recordó que el departamento, lamentablemente, depende de la informalidad laboral, porque el Estado es incapaz de generar una considerable cantidad de nuevos puestos de empleo.

A pesar de este panorama, opinó que en Puno las artesanas demuestran que pueden salir adelante con sus productos textiles que venden en las ferias. Sin embargo, agregó que esto no es suficiente, por lo que indicó que se tiene que apostar por la industrialización, tal como ocurre en los países desarrollados.

En ese sentido, sostuvo que el oro y el litio (que más adelante se extraerá del suelo puneño) no solo deberían exportarse como materia prima. “Se necesita industrializar la región (…) con más inversión privada y del Estado”, señaló.

FBR