La denuncia de Juan Sheput, refleja una preocupación seria sobre el abuso de poder y la manipulación institucional en el contexto político y judicial del Perú, siendo preocupante observar que se mencionen casos donde se manipulan operativos policiales o se instrumentalizan instituciones públicas para fines políticos
Como están las cosas, señala Sheput, estamos expuestos a un grave problema de corrupción y falta de ética en el sistema político y policial y estas prácticas no solo minan la confianza en las autoridades, sino que también violan derechos fundamentales como el debido proceso y la presunción de inocencia.
En este sentido, sería crucial que organizaciones de derechos humanos, periodistas y la sociedad civil investiguen y den visibilidad a estos casos. Asimismo, es importante que se exija una supervisión independiente y transparente de las actuaciones de las fuerzas del orden y los representantes políticos, para garantizar justicia y evitar que se repitan estos abusos.
El político, expresa que estamos llegando a niveles ridículos en la defensa de Dina Boluarte generando otros delitos, la mejor prueba de quien ha tenido que pedir permiso para una sucesión constitucional han aparecido firmas falsas en documentos oficiales cuando se compara la firma de la presidenta en documentos del despacho presidencial se nota que son completamente distintas.
Intervención quirurgica
La presidenta no estaba en su capacidad completa como consecuencia de la operación como para poder discernir y firmar esos documentos y como el estado no se puede paralizar no ha faltado me falsificador o un sujeto que ha procedido a afirmar generando delito adicional
Sobre ese tema y la no solicitud de permiso al Congreso de su situación, hay un falso debate no se pide permiso solo se comunica y ni siquiera tiene que decir de qué se trata porque ella tiene derecho a estirarse la cara a hacer lo que quiera, pero tiene que comunicar por qué podría producirse una desgracia un terremoto más aceptado algo así tiene que haber quién, asume entonces el mando actúa con mucha y responsabilidad, evitando generar delitos.
Pena de muerte
Respecto al comentario de la presidenta sobre la pena de muerte, Sheput señaló, “por la dimensión política de Dina Boluarte su credibilidad está tan baja que no hay ni un solo periódico en todo el país que haya puesto esas declaraciones, en lo político ya no existe credibilidad.
Además, comentó que para cambiar la pena de muerte en el Perú que se abolió en 1978, es dificilísimo, en primer lugar, tendría que haber un cambio constitucional que significaría un año y medio por lo menos y en segundo lugar tenemos que renunciar a una serie de pactos como el de San José que dice, si uno ha dejado la pena de muerte y el Perú la dejó en 1978, ya no puede volver a él.(FB)