
Con lágrimas, recuerdos y oraciones, los familiares de las 18 víctimas del 9 de enero de 2023 volvieron a rendir homenaje a sus seres queridos que perdieron la vida durante las protestas registradas en los alrededores del aeropuerto Inca Manco Cápac y en el centro de la ciudad de Juliaca. A más de dos años de aquel trágico día, las familias aún claman por justicia.
Durante este 1 y 2 de noviembre, los deudos realizaron tómbolas solidarias y actividades conmemorativas en diferentes sectores de Juliaca y en otras provincias de la región Puno, como una forma de mantener viva la memoria de las víctimas y financiar las acciones legales que continúan emprendiendo en busca de justicia.

“Es un momento muy triste, nos quitaron la vida de mi hermano de una manera cruel. Tenemos que recordarlo, no podemos pasar por alto su ausencia. Duele, pero debemos recordarlo”, expresó Raúl Samillán Sanga, hermano de Marco Antonio Samillán, el joven médico que fue asesinado mientras auxiliaba a un herido durante las manifestaciones.
Con la voz entrecortada, Raúl recordó que su hermano era “el más alegre de la familia, el que siempre nos unía”. Agregó que cada actividad conmemorativa representa una forma de seguir exigiendo justicia y de demostrar que sus seres queridos no serán olvidados.

El también presidente de la Asociación de Víctimas del 9 de Enero, señaló que el proceso judicial avanza con lentitud y que los familiares sienten que el sistema de justicia no actúa con igualdad. “Es un dolor tener solo una foto de tu familiar que te arrebataron. La justicia es muy lenta para los hijos del pueblo; parece que solo funciona para quienes tienen poder económico”, manifestó con indignación.
Los deudos reiteraron su compromiso de continuar luchando hasta que se identifiquen y sancionen a los responsables de las muertes ocurridas durante aquel fatídico día, en el que Juliaca se tiñó de luto. “Seguiremos de pie, por nuestros hermanos caídos”, afirmaron entre lágrimas, al encender velas y colocar flores en memoria de las víctimas.

