Los efectos de la crisis hídrica están comenzando a generar mayor preocupación en el sector agrícola de la región de Puno. Así lo manifestó el director de estadísticas de la Dirección Regional Agraria (DRA) de Puno, Germán Cutipa Flores, quien advierte serios perjuicios en el período de siembra de la campaña agrícola 2023-2024, que comenzó en agosto.
El especialista señaló que la escasez de agua está teniendo un impacto negativo en la reducción de las hectáreas sembradas de varios productos alimenticios. Los más afectados son los cultivos de granos, como la quinua, que debería haberse sembrado desde agosto.
Cutipa detalló que en el año 2022 se sembraron 28 hectáreas de quinua, pero hasta ahora, en la misma época del año, solo se han sembrado 11 hectáreas, lo que representa una disminución del 60% con respecto a la campaña anterior. En cuanto a los cultivos anuales y temporales, mencionó que el año pasado se sembraron 9,752 hectáreas, mientras que hasta la fecha solo se han sembrado 7,056, lo que representa un déficit del 27%, siendo la papa otro de los cultivos perjudicados.
El funcionario recordó que la siembra de cada producto sigue un calendario específico, y dado que ya estamos en octubre, cultivos como el maíz, la cebada, las habas y la mashua corren el riesgo de ser sembrados en cantidades mínimas, lo que supone grandes pérdidas para los agricultores.
Cutipa indicó que los cultivos en los valles interandinos de Sandia y Carabaya, como la papa y el maíz, no se han visto muy afectados. Sin embargo, en el altiplano, ante la posibilidad de un fenómeno del Niño Global, el panorama para el sector agropecuario es preocupante.
Alerta Senamhi
Es urgente implementar un sistema de alerta temprana, según el jefe del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) en Puno, Sixto Flores Sancho. Este sistema fue aprobado en 2021 y se requiere que se implementen acciones de respuesta de manera inmediata.
Flores recordó que el nivel del lago Titicaca ha descendido al nivel registrado en 1996, que es de 308.10 metros sobre el nivel del mar, y dado el pronóstico de escasas lluvias hasta diciembre, es inevitable que continúe retrocediendo, encaminándose hacia la sequía histórica más dramática.(La República)