“Sí, acepto, señora presidenta”. Con estas palabras, el exasesor del dictador Alberto Fujimori, Vladimiro Montesinos, aceptó someterse al procedimiento de sentencia anticipada, lo que supuso reconocer su participación en el secuestro y asesinato de 16 personas por parte del destacamento de operaciones especiales grupo Colina, ocurridas en enero y julio de 1992.

La sentencia anticipada será por el secuestro y asesinato de nueve estudiantes y un profesor de la universidad Enrique Guzmán y Valle-La Cantuta y seis pobladores de la localidad de Pativilca, en Barranca. Mientras Montesinos reconocía su responsabilidad; desde su casa, un risueño Alberto Fujimori insistía en su inocencia o que este caso se incluya en el irregular indulto que le otorgó el expresidente Pedro Pablo Kuczynski.

Para no dejar dudas sobre su reconocimiento de responsabilidad, la presidente del tribunal, la jueza Miluska Cano, le volvió a preguntar si aceptaba las imputaciones de la Fiscalía y la propuesta de responsabilidad civil, a lo que el exasesor presidencial y jefe de facto de los servicios de inteligencia volvió a responder: Sí, acepto, señora presidenta.

R.G.Q