La fiesta de la Virgen de la Candelaria es una de las expresiones religiosas y culturales más importantes del mundo, en que cientos de miles (y hasta millones) de devotos le rinden culto a la virgen con danza, canto y música como elementos simbólicos de la cosmovisión andina, expresión que la derecha ni la presidenta Boluarte entienden ni entenderán. Ardió Candela en los devotos de la virgen, haciendo retroceder a Dina Boluarte en su despropósito de afrenta a Puno forzándola con su presencia.
En el sur, y más específico en Puno, esta festividad se ha convertido en expresión de la resistencia al régimen de la coalición autoritaria y corrupta desde que la presidenta Boluarte amenazó con llegar en plena festividades de la Candelaria, como si le importara poco el dolor de un pueblo al que su gobierno le arrebató sus mejores hijos, solo por exigir elecciones adelantadas para que se vayan todos.