Foto Internet: Dirección de Control y Vigilancia de la Dirección General de Salud (Digesa), Elmer Quichiz

Una vez que se levante la cuarentena, los clientes de los restaurantes deben ser los primeros fiscalizadores de que el personal de reparto de comida a domicilio cumpla con las normas sanitarias establecidas en la guía técnica que aprobó el Ministerio de Salud (Minsa) para esta actividad.

Así lo manifestó esta noche el titular de la Dirección de Control y Vigilancia de la Dirección General de Salud (Digesa), Elmer Quichiz, en entrevista con Canal N.

El funcionario precisó que los repartidores deberán cambiar de mascarilla en cada entrega de comida, para aminorar el riesgo de contaminación y contagio del covid-19.

Asimismo, explicó que no es recomendable el uso de guantes en el reparto de comida, pues otorga a quien los emplea “una falsa sensación de seguridad”. Lo correcto es el lavado de manos frecuente o la desinfección con alcohol gel y la limpieza de la caja de traslado con alcohol etílico al 70 %.

El alcohol recomendado es el de 70 % toda vez que el de mayor grado, aunque es más puro, se evapora más rápido y no cumple con el objetivo de inactivar al coronavirus, detalló Quichiz.

Foto Internet: Entrega de comida por delivery

Responsabilidades

En cuanto al personal de cocina, el funcionario recordó que son los restaurantes los que deberán garantizar que el personal cumpla con las normas sanitarias establecidas en la Guía Técnica para los Restaurantes y Servicios Afines con Modalidad de Servicio a Domicilio.

Los restaurantes tendrán que controlar la temperatura de las personas que ingresan a trabajar en cocina, supervisar que no presenten ningún síntoma asociado al covid-19, mantener la distancia social y dotarlas con el equipo de protección personal respectivo: mascarillas, guantes, mandiles, gorros y botas.

“Todo eso está establecido en las normas sanitarias que rigen para los restaurantes desde hace años, son reglas que no son de ahora”, enfatizó el representante de Digesa.

Foto Internet: Pollo a la brasa

Control municipal

La labor de supervisión de restaurantes propiamente dicha está a cargo de los gobiernos locales, añadió. “Los servicios de alimentación y los mercados son competencia de los municipios, a través de sus gerencias de Fiscalización y Control”.

Quichiz recomendó que, al momento de recibir los alimentos, también el comprador debe usar una mascarilla y guardar una distancia de al menos un metro y medio respecto al repartidor.

Una vez que reciba su compra, el usuario debe desinfectar los empaques con alcohol y, antes de manipular los alimentos, tendrá que lavarse las manos con agua y jabón por al menos 20 segundos. (Andina)

Por admin