Foto Web: Cálculos Renales

Las píedras o cálculos renales, conocidas también como litiasis son masas duras formadas por la acumulación de elementos presentes en la orina, que normalmente deberían ser expulsados con esta.

En el proceso de filtración de la sangre los riñones van desechando sustancias como calcio, oxalatos, fosfatos, ácido úrico, etc.  pero si hubiera un desequilibrio en su funcionamiento esto puede provocar que esos elementos se cristalicen y empiecen a formar los famosos cálculos renales. 

Las causas más frecuentes

Existen muchos factores que pueden ocasionar la formación de cálculos renales, como:

– Factores genéticos. Suele haber antecedentes familiares de cálculos renales.

– Alteraciones metabólicas. Impiden la correcta la eliminación de calcio u otros elementos.

– Exceso de sal o azúcar en los alimentos.

– Dieta abundante en proteína de origen animal.

– Infecciones urinarias frecuentes.

– Falta de una correcta hidratación al hacer ejercicio.

– Dietas extremas que restringen el agua.

– Ambientes con clima caluroso sin la adecuada hidratación.

– Medicamentos diuréticos.

– Sedentarismo.

¿Cómo saber si tengo cálculos renales?

Si bien la presencia de cálculos puede ser imperceptible, ya que normalmente se depuran en la orina, el tamaño o la forma del cálculo puede ocasionar problemas.

– El dolor en la zona lumbar es un signo característico. Este dolor tiene un inicio rápido e intenso, puede aparecer en la zona lumbar (parte media de la espalda), baja por la cintura y llega a la parte baja y lateral del abdomen. Es conocido como cólico renal y puede ser producido cuando un cálculo ha obstruido el uréter, que es la vía por donde desciende la orina.

– La presencia de sangre o un color enrojecido en la orina es otro signo a considerar. Esto se produce por las lesiones que ocasiona el cálculo en las paredes del uréter.

– También se puede sentir ardor al orinar.

¿Se pueden prevenir?

Al ser un problema multifactorial existen muchas medidas que podemos tomar. La clínica Urozen, centro especializado en urología y prevención oncológica, ofrece algunas recomendaciones que pueden ayudar a prevenir este tipo de problemas:

– Tome la cantidad de líquido necesaria para poder orinar 2 litros al día, de preferencia agua.

– Evite la ingesta de gaseosas.

– Controle que el color de tu orina sea casi amarilla clara.

– Si hace ejercicio o se encuentra en ambientes calurosos, recuerde tener una correcta hidratación.

– Reduzca el consumo de sal de sus alimentos.

– Modere el consumo de carne.

– Modere el consumo de bebidas que contengan cafeína.

– Si ha tenido cálculos renales antes, debe estar alerta. Debe llevar un control permanente ya que existe la posibilidad de que los cálculos se presenten nuevamente.

– Si presenta algunos de los signos mencionados como dolor lumbar, ardor al orinar o presencia de sangre en la orina, acuda al especialista para realizar la evaluación correspondiente. (Andina)