
Ayer en las instalaciones del Coliseo cubierto de la ciudad de Ilave en la provincia de el Collao, se reunieron autoridades y dirigentes, quienes analizaron la respuesta que tiene el gobierno de Martín Vizcarra, sobre el pedido de cese el proyecto Vilavilani Fase II, solicitado por los pobladores aymaras afectados por el mencionado proyecto.
Tras un arduo debate se llegó al acuerdo de paralizar posiblemente desde el 24 o 25 del presente, porque se considera que sería la única forma de ser escuchados y atendidos. Puesto que megaproyecto hidráulico Vilavilani II, autorizado por el Ministerio de Agricultura, supone el trasvase de aguas altoandinas hacia la región Tacna con fines agrícolas, consumo humano y, para trabajos en minería, según los pobladores.

En la reunión también se abordó el caso de los dirigentes, sociedad civil y autoridades denunciadas por el proyecto Especial Tacna, luego que días atrás se registrara un incendio en el proyecto, encontrando responsabilidad en la población aymara que acataba una paralización en el lugar.
Al respecto el congresista por la región Puno, Rubén Ramos quien participó de la reunión, informó que se acordó solicitar la intervención del colegio de abogados de Puno y los congresistas, para revertir la denuncia, puesto que los argumentos no serían correctas.
Finalmente indicó que los pobladores aymaras, afectados están completamente seguros, que la única forma de hacer valer sus derechos, es mediante las luchas.