
Rudy Puma, gestor comercial de productos lácteos en Agromercado, explicó: “En comparación con otros años, la producción de quesos ha disminuido. A pesar de estar en temporada de lluvias, el incremento en la producción de leche no ha sido el esperado”. Según el especialista, las constantes precipitaciones han afectado al ganado lechero, ya que los animales no han podido alimentarse de manera óptima durante el día, lo que ha reducido la producción láctea.
Las consecuencias ya se reflejan en el mercado. “El aumento en el costo de la leche y el queso es inevitable. El queso fresco no pasteurizado, como el tipo paria, tiene un mercado muy limitado, donde los consumidores difícilmente pueden pagar más de 20 soles”, advirtió Puma.
Ante este panorama, sugirió diversificar la producción hacia quesos maduros o semimaduros, que puedan acceder a mercados más exclusivos y garantizar la sostenibilidad económica de las plantas queseras. “Muchas plantas apenas sobreviven, ya que el queso fresco no genera tantas ganancias como los quesos madurados”, agregó. (FB)