
En un operativo conjunto liderado por la Policía Nacional del Perú, a través de la División de Investigación contra el Tráfico Ilícito de Drogas (DEPOTAD) San Román, con la participación de la Fiscalía Especializada en Tráfico Ilícito de Drogas y personal de SUNAT–Aduanas Puno, se logró un importante golpe al narcotráfico tras el hallazgo de más de 63 kilos de cocaína ocultos en un envío de carga dentro de los almacenes de la empresa de transportes Shalom, en la ciudad de Juliaca.
Durante la intervención, efectuada como parte de un operativo de rutina, las autoridades inspeccionaron varios bultos y detectaron cuatro cajas de cartón aparentemente utilizadas para el envío de hojas bond tamaño A4. Sin embargo, al ser revisadas, se descubrió que contenían 62 paquetes tipo ladrillo, cuidadosamente forrados con cinta adhesiva color amarillo, que ocultaban en su interior una sustancia blanca pulverulenta.

Al ser sometida a la prueba de campo con el reactivo tiocianato de cobalto, la sustancia mostró una coloración azul turquesa, resultado presuntivo positivo para alcaloide de cocaína. El peso total del estupefaciente decomisado fue de 63 kilos con 659 gramos (63.659 kg).
Las primeras investigaciones indican que el envío había sido remitido desde la ciudad de Lima con destino a Juliaca, lo que sugiere la existencia de una red logística de narcotráfico que opera a nivel interregional, utilizando empresas de transporte de carga para el traslado encubierto de drogas.

Según estimaciones policiales, con esta intervención se logró afectar la estructura económica de la organización criminal en aproximadamente 93 mil dólares americanos (US$ 93,000.00), debilitando su capacidad operativa y su cadena de distribución.
Las autoridades informaron que continúan las diligencias para identificar y capturar a los responsables del envío, así como para determinar la ruta y el destino final del cargamento.

Este resultado, enfatizó la Policía, refleja el compromiso permanente de las fuerzas del orden y las instituciones aliadas en la lucha contra el tráfico ilícito de drogas, un flagelo que continúa afectando la seguridad y el desarrollo de la región Puno y del país.
