Las inversiones privadas son necesarias para el desarrollo del Perú; pero, estas pueden ponerse en riesgo si no se les ofrece las seguridades jurídicas a las empresas. Este panorama suele darse cada vez que aparecen las amenazas del cambio de Constitución, especialmente cuando apuntan al capítulo económico.
“Para garantizar las inversiones, también es importante el respeto al estado de derecho, cuya garantía de cumplimiento está a cargo del Poder Ejecutivo y el sistema judicial (Ministerio Público y Poder Judicial). Sin embargo, en nuestro país este respeto es irregular”, precisó el politólogo Félix Álvarez Velarde en su libro ‘El fracaso del socialismo en el mundo’. De paso, recordó que en el Perú el 80 % de los negocios están en el campo del sector privado.
Mientras que el economista senior del Instituto Peruano de Economía (IPE), Teodoro Crisólogo, reiteró que el PBI nacional cerraría el año con una caída del -0.3 %; aunque, vaticinó que para el 2024 crecería al 2.1 %.
“El deterioro (del PBI) obedece al entrampamiento en un círculo vicioso en el cual ha caído la economía peruana. Hablamos de un círculo de baja confianza empresarial, de débil desempeño de la inversión privada, de menor creación de empleos y de debilidad del consumo”, refirió.