El tramo Santa Rosa – Nuñoa, ejecutado en 2010 con una inversión superior a los 17 millones de soles por parte de la empresa Minsur bajo la modalidad de Asociación Público-Privada (APP), es solo el primer paso de un proyecto vial más ambicioso. Actualmente, se busca ampliar la participación del sector privado para completar el eje pendiente y consolidar la conectividad en la región.

Hermógenes Zamata Mamani, presidente del comité de gestión de la carretera, explicó que la demora en la ejecución se debe a la burocracia estatal: «El Estado es burocrático, hay levantamiento de observaciones, nuevamente se levantan las observaciones, hay cambio de funcionarios», señaló.

En la actualidad, la empresa Intersur está involucrada en el proceso, y se espera la incorporación de una tercera empresa. «La inversión privada genera desarrollo económico local, empleo y también aporta divisas al Estado», afirmó Zamata. Sin embargo, advirtió que, aunque el inicio de la obra está previsto para 2026, la lentitud en los trámites técnicos y la inestabilidad política podrían seguir retrasando su ejecución.

Finalmente, resaltó el respaldo institucional al proyecto: «Tenemos la predisposición de la municipalidad provincial de Melgar y ahora también lo hemos escuchado de propia voz del gobernador regional». Subrayó que la clave para concretar la obra será el trabajo conjunto entre autoridades, organizaciones comunales y el sector privado.(FB)