La Municipalidad Provincial de San Román ha intensificado sus acciones contra los locales nocturnos irregulares tras la trágica balacera en el barrio San Isidro. El gerente de Fiscalización, Percy Quispe González, anunció el cierre definitivo de cinco establecimientos en la zona y destacó que desde enero se han clausurado 28 locales más.
«Los tapeados significan que no volverán a funcionar ni abrirán sus puertas nunca más», afirmó Quispe, enfatizando la determinación de la municipalidad de acabar con los problemas generados por estos establecimientos.
Sin embargo, una interrogante persiste: ¿Cuántos de estos locales clausurados tienen procesos de cobranza coactiva en curso? Ante esta consulta, el gerente reconoció que no cuenta con un dato preciso. «Los propietarios están presentando recursos administrativos», se limitó a responder.
La falta de claridad sobre el número de locales con procesos de ejecución coactiva genera dudas sobre la efectividad de las clausuras y la recuperación de las multas impuestas.
Estas versiones fueron realizadas tras los hechos de sangre que se registraron en el jirón Torococha el último domingo 03 de noviembre, donde fallecieron dos ciudadanos que fueron identificados como: Reynaldo Ruiz Pari (35), quien fue trasladado gravemente herido a la clínica americana, donde lamentablemente falleció.
El otro cuerpo, aún sin identificar, fue ingresado al hospital Carlos Monge Medrano. En las próximas horas se conocerá su identidad.
Ambas víctimas fueron auxiliadas por personas que se encontraban en el lugar y trasladadas en vehículos particulares, pero desafortunadamente no pudieron sobrevivir.
