Melanio Luque, subgerente de Estudios Definitivos del Gobierno Regional de Puno, se pronunció sobre las denuncias de posibles despidos arbitrarios, señalando que el retiro de personal se realizó tras una evaluación de cumplimiento de funciones. Explicó que dicha evaluación, que tuvo una duración de entre tres y cinco días, determinó que los profesionales afectados no cumplían con una función esencial dentro de la subgerencia.

En relación con las deudas pendientes, menciono que efectivamente el anterior gerente habría dejado deudas pendientes; sin embargo, estas no figuran en el acta de entrega de cambio. No obstante, indicó que diversos profesionales se acercaron para exponer sus casos. Para resolver la situación, se instauró un procedimiento administrativo para viabilizar los pagos de meses anteriores, el cual debe ser presentado y sustentado por los jefes de los proyectos.

Finalmente, el subgerente destacó que el principal cuestionamiento radica en que los profesionales afectados, alrededor de 12, no entregaron los resultados ni los productos de sus funciones. (R.A.)